miércoles, 3 de marzo de 2010

PRESIDENTA PALIN EL VERDADERO PELIGRO DE ELEGIR A ESTA CANDIDATA

Desde su llegada, Sarah Palin ha captado la atención de la prensa americana y
europea, desplazando incluso a Obama y a McCain. La razón fue la sorpresa de su elección, al estilo clásico de McCain, y su edad. Con 72 años sería el Presidente de mayor edad, y en caso de que falleciera, esta desconocida madre de cinco hijos llegaría a Presidente del Mundo Libre.
En Europa, la posibilidad causó escalofríos. He leído con diversión muchas páginas, claramente escritas desde la autocomplacencia, que describían a la candidata a la vicepresidencia como “ultra conservadora” o “fundamentalista”. Veo que Sarah Palin es la típica americana que a cierto tipo de europeo le encanta criticar. A juzgar por las descripciones hechas de la señora Palin, uno podría pensar que se trata de la reencarnación, en versión alascana, del Ayatolá Jomeni, que ha vuelto para secuestrar las elecciones americanas y mandarnos a la edad media. El problema de tales interpretaciones es que no ven a la persona en su contexto sociohistórico y sacan conclusiones equivocadas. Pero lo importante, es que tales visiones nos distraen del verdadero peligro que supone su elección a vicepresidenta.
Hay que ver la religión de un norteamericano en clave de su cultura, con una fuerte base religiosa. Conviene recordar cómo se construyó este país: con la fuerza y desesperación de huidos, en muchos casos, perseguidos por querer practicar su religión. Sus orígenes les han conferido un carácter idealista. La declaración energética de sus creencias religiosas está fuertemente vinculada a ese idealismo y lo viven como una expresión de su libertad. El hecho de que Sarah Palin tenga profundas creencias religiosas que afectan a sus ideas políticas no es un problema en sí. Tony Blair también las tenía pero nadie le tildó de “fundamentalista”, ni vinculaba su política a sus creencias religiosas. En cambio, lo que sí puede serlo es la calidad de liderazgo de Sarah Palin.
Divide el mundo en buenos y malos. En suma, total desprecio por las reglas del juego democrático. Un enfoque que divide en vez de unir, generando guerras
Si analizamos su interpretación de la práctica de la política y su preparación en caso
de tener que convertirse en Presidente, lo más preocupante de Palin es su total adopción del juego político desarrollado, durante los últimos ocho años, por un sector del partido republicano. Sus arquitectos -Carl Rove, George W Bush y Dick Chenney-, han creado un estilo de hacer política que desprecia cualquier análisis profundo y consultado; simplifica terriblemente una realidad cada vez más compleja; divide el mundo en buenos y malos. En suma, total desprecio por las reglas del juego democrático, magníficamente establecidas en la Constitución americana y defendidas a un gran coste en dos guerras mundiales. Un enfoque que divide en vez de unir, generando guerras. Una política que destruye en vez de construir.
Lo que veo en el estilo de liderazgo de Palin es la aplicación de frases aprendidas de memoria, y repetidas una y otra vez, con un posicionamiento de enfrentamiento al oto. Estas frases no explican que políticas apoyaría ni dan ninguna idea sobre qué haría junto a McCain, si fueran elegidos en un momento de retos históricos enormes. En cambio ataca a Obama por ser blando con los rusos y los iraníes (los malos con sombreros negros), por ser cobarde al no intentar la “Victoria” en Irak (sea cual sea su significado) y por no ser patriota; al parecer Obama conoce a un ex terrorista que lanzó bombas contra la policía durante la guerra de Vietnam a los finales de los años 60; él tenía 8 años.
Reconozco mis simpatías por los demócratas, como la inmensa mayoría de mis compatriotas australianos y de mis compañeros europeos, pero creo que la evolución del estilo republicano, adoptado con tanto entusiasmo por Palin, es una traición a su partido y a republicanos como Lincon, Regan y Eisenhower, quienes defendieron la constitución y lucharon contra la división. Intuyo que los americanos quieren ver el acercamiento Rove / Bush / Chenney relegado a la basura de la historia. Así, el problema con Palin no es que sea religiosa y conservadora, sino que asume 100% un estilo de liderazgo que desprecia la reflexión, la consulta, el consenso y la colaboración, y valora la agresión y la división.
Y si esto no fuera suficiente, su falta de preparación y conocimiento del mundo es realmente motivo de pánico. En su reciente entrevista con la periodista Katie Couric de la CBS demostró no tener el más mínimo nivel de cultura o de conocimiento de política internacional o económica. ¿Cómo podría desempeñar el oficio de Presidente de los Estados Unidos de América? ¿Qué pasó por la cabeza de McCain a la hora de elegir a una persona sin ninguna preparación?
La elección no habla bien del Liderazgo de McCain. Durante los últimos 20 años habíamos visto un político con conciencia social, a veces enfrentado a su partido por defender sus principios. Lo hemos visto con su oposición a Rumsfield por su forma de llevar la guerra de Irak y lo hemos visto en su búsqueda de una política consensuada entre republicanos y demócratas, con la inmigración. ¿Pero dónde está ese McCain? Su elección de Sarah Palin movilizó a un ala de su partido hostil a él, pero ¿a qué coste? En mi opinión, ha sido uno de los actos políticos más irresponsable que hasta ahora he visto, realizado en un momento en que los votantes americanos piden pragmatismo. Lejos de hacerle ganar las elecciones, podría incluso hacérselas perder.

Douglas McEncroe, socio director de Douglas McEncroe Group Publicado en Cinco días, el 1 de Noviembre de 2008.

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